Archive for septiembre 2012

Su amor es suficiente

septiembre 4, 2012

Que quiere decir Dios cuando dice:

“Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo”. 2 Corintios 12:9 RVA60

Otra versión dice:

“Pero el Señor me ha dicho: «Mi amor es todo lo que necesitas; pues mi poder se muestra plenamente en la debilidad.» Así que prefiero gloriarme de ser débil, para que repose sobre mí el poder de Cristo”. 2 Corintios 12:9 DHH

El vacio en todos nosotros:

Todos tenemos un vacio que necesitamos llenar, es decir para sentirnos completos necesitamos complementarlo con algo más en nuestra vida. Ese vacío se presenta de muchas maneras, mayormente por las cosas que traen una satisfacción aunque sea temporal. Esa satisfacción muchas veces es demasiado temporal y pasajera aunque dure varios años no nos satisface del todo. Aun la palabra misma, el conocimiento, las riquezas, las posesiones, las amistades, una persona, un sueño, la religión, etc. Dios en su diseño nos hizo con esa falta, con esa necesidad que debemos satisfacer. Pareciera que Dios nos dejara probar tantas cosas en la vida para demostrarnos que es realmente a él a quien andamos buscando.

“Cuídate de no olvidarte de Jehová tu Dios, para cumplir sus mandamientos (dirección), sus decretos y sus estatutos que yo te ordeno hoy; no suceda que comas y te sacies, y edifiques buenas casas en que habites, y tus vacas y tus ovejas se aumenten, y la plata y el oro se te multipliquen, y todo lo que tuvieres se aumente; y se enorgullezca tu corazón, y te olvides de Jehová tu Dios, que te sacó de tierra de Egipto, de casa de servidumbre; que te hizo caminar por un desierto grande y espantoso, lleno de serpientes ardientes, y de escorpiones, y de sed, donde no había agua, y él te sacó agua de la roca del pedernal; que te sustentó con maná en el desierto, comida que tus padres no habían conocido, afligiéndote y probándote, para a la postre hacerte bien; y digas en tu corazón: Mi poder y la fuerza de mi mano me han traído esta riqueza. Sino acuérdate de Jehová tu Dios, porque él te da el poder para hacer las riquezas, a fin de confirmar su pacto que juró a tus padres, como en este día”. Deuteronomio 8:11-18

Dios sabe que en el corazón del hombre hay una tendencia a separarnos de él, a remplazarlo con algo que no es él. Ya sea con conocimiento, sea placer, sea posesiones, sea dinero, sean religiones, sean creencias. Dios sin embargo el quiere ocupar ese vacío de nuestro corazón. Dios en su misericordia y amor le dio a la gente de Israel en el desierto una ley que cumplir, mas sin embargo el orgullo puede cambiar el sentido de las cosas. La ley o instrucción estaba destinada a que el hombre reflexionara sobre su condición delante de Dios, pero más que una ley era un conjunto de instrucciones para que le fuera bien al pueblo. Dios a través de esta ley nos dio parámetros para llegar a él, es decir el destino que llevaba la ley era encontrarlo él. Esta ley sin embargo no era perfecta para no depende de ella sino de Dios el dador de la ley (instrucción). Aunque la ley es santa, no reemplaza a Dios mismo. Estos parámetros o mandamientos por provenir de parte de Dios son santos y son especiales, nos acercan a Dios. Moisés solo llegó a los límites de tierra prometida con la ley (instrucción) como queriendo decir que estaba incompleta porque faltaba Cristo. Pero aun así todas las cosas que hagamos no son suficientes para llenar ese vacío del corazón del hombre. Esta porción de Deuteronomio dice que Dios trajo al hombre por el desierto para humillarlos, para probar que había en el corazón. (Esta verdad se cumple en nuestras vidas). Humillar quiere decir reconocer y en ningún momento es despreciar al hombre sino que reconozca quien es Dios.

El vacio es el desierto en el corazón:

El desierto significa el caminar en Dios para llenar una necesidad, esa búsqueda nos lleva a probar muchas cosas. En el desierto la gente se hizo de dioses y se fabricó objetos de adoración (el hombre queriendo llenar ese vacío). En el desierto Dios te quiere enseñar que nada de lo que hagas podrá darte lo que Dios te puede dar. Dios le dio la ley a su pueblo mas sin embargo la ley no los metió a la tierra prometida. La ley fue dada inmediatamente después de salir de Egipto. Así que la ley los acompañó por sus cuarenta años en el desierto pero la ley no los metió a la tierra prometida. Sin embargo, Dios determinó el tiempo y la razón para entrar a la tierra prometida. Fue Dios y fue cuando él decidió esta es otra lección de vida.

Las pruebas del desierto nos hacen reconocer que no depende de nosotros y por más que intentemos de poner nuestra vida en nuestras propias manos nunca alcanzaremos a merecer la salvación o las bendiciones de Dios. Las pruebas del desierto son para evitar que podamos poseer la verdad de Dios con orgullo. El desierto es la preparación de Dios en tu vida para prepárate para poseer la tierra. Dios quiere evitar que creas que tu esfuerzo lo logro. Siempre habrá una debilidad que te lo recuerde que sin Dios no eres nadie. ¿Estas listo para recibir mas bendición? Gózate porque después del desierto hay una bendición grande de parte de Dios una vez que dejas que tu orgullo muera.

“En el desierto la gente disfruto del maná, pero en el nuevo testamento Jesus enseñó con verdadero pan.”

Todas las ilustraciones de Jesús fueron con verdadero pan. Y ya para cumplir su propósito en la cruz, dijo yo soy el verdadero pan que descendió del cielo. Ese maná del desierto anunciaba el verdadero pan. Tomad comed este es mi cuerpo, soy yo el que cada mañana Dios declaraba en el desierto desde los cielos que iba a descender.

¡Cada mañana Dios mostró su misericordia anunciando el verdadero pan!.

En el desierto Dios te habla sin que le entiendas porque tu corazón esta endurecido todavía. Tú puedes ver el maná pero no alcanzas a entender la gran misericordia de Dios, el verdadero pan del cielo Jesucristo. Tú has decidido seguir tu camino pero él no te ha abandonado. En el desierto el provee del agua de la roca. Ese manantial que temporalmente quita la sed y Dios no te abandona para no desahuciarte. Jesus es la verdadera agua recuerdas lo que él dijo: “él tenga sed que venga a mí y beba”. “Yo le daré del agua de vida”.

Nada podrá saciar tu ser solo Jesús:

Nada podrá saciar tu ser, Dios en su infinito amor y misericordia permitirá que pruebes todo hasta darte cuenta que mas que necesitar una religión, riquezas, posesiones, placeres, conocimiento… más que todo eso, lo necesitas a él. ¡Su amor es suficiente!. Su amor es lo único que puede satisfacer tu corazón.

Entraras a la tierra prometida cuando te des cuenta que no hay nada que tengas para gloriarte, no hay nada que poseas para llevarte a la bendición. Es él, él es la bendición, a pesar de tu vacio y tu necesidad, él es el único que llenará ese vacío constante, se llama Jesucristo.

Moisés representa más que un personaje en la biblia es una etapa de tu vida y de la mía. Es la etapa que todos debemos cruzar, esa etapa representa lo que yo nunca lograre por mis esfuerzos. La ley no se dio dentro de la tierra prometida, se dio afuera de la tierra prometida. Dios nunca dijo la ley te meterá dentro de la tierra prometida, pero sí dijo: ‘’yo te meteré dentro de la tierra”.

Hay áreas de tu vida deben ser conquistadas, son áreas que no han sido doblegadas a Dios, tal vez hay cosas que han querido reemplazar a Dios. Tú lo sabes, nadie más lo sabe. ¿Entras a la tierra por la promesa o por cumplir los mandamientos?. Dios determinó un tiempo para meter a su pueblo a la tierra prometida (40 años), pero no fue el cumplimiento de la ley, en todo caso entró el que quiso entrar. Los que no quisieron se quedaron afuera porque les pareció mejor (Dos tribus y media). Es decir continuaron con su soberbia. Imagínate cuarenta años esperando conquistar la tierra prometida y algunos prefirieron quedarse afuera.

Dios nos lleva a los límites y nos muestra la tierra prometida, pero el Moisés que llevamos dentro no nos dejará entrar. ¡Ese Moisés debe morir!. Moisés si cumplió con la ley ¿Pero porque Dios no permitió que Moisés entrará a poseer la tierra?. Porque Dios nos estaba dando una lección de vida. Recuerda Moisés representa una etapa de tu vida y la mía.

Moisés a pesar de ser espiritual y seguir a Dios con humildad y mansedumbre mas que nadie en la tierra, Moisés representaba todo aquello que nos lleva a depender de nosotros mismos, esa característica siempre acompañó a Moisés. Ni su humildad y mansedumbre lo metieron a la tierra prometida porque en la tierra prometida no puede entrar el orgullo. Por eso Moisés se fatigó, por eso padeció, por eso regresó al desierto después de cuarenta años. Moisés vivió en total ochenta años de su vida en el desierto. Moisés es la figura que Dios uso para darnos esta lección de vida. Después también Dios escogió a todo un pueblo para enseñarnos estos principios.

Josué fue una persona que se distinguió por creerle a Dios. Todos conocemos su atrevimiento, estuvo a punto de ser apedreado por creerle a Dios. Aguantó cuarenta años sabiendo lo que Dios era capaz de hacer por obedecerle. Si bien Moisés es un gran ejemplo para nuestra vida para bien, Josué lo fue para enseñarnos a depender de las fuerzas de Dios desde un inicio. Josué entró a conquistar la tierra prometida, las primeras murallas que debieron caer cayeron por el poder de Dios y no la sabiduría de Josué. No cayeron por cumplir la ley, cayeron por obedecer a Dios. Cayeron por depender de Dios completamente.

Pasaron cuarenta años para que la gente de Israel se diera cuenta que solo con rodear las murallas durante siete días y al séptimo día siete veces, y al gritar fuerte las murallas caerían. ¡Las murallas de su mente y de su corazón también cayeron ese día!.

Bástate mi gracia…

Bástate mi gracia significa que su amor es suficiente, su gracia es suficiente, su misericordia es suficiente, su perdón, el es suficiente para mí y para cada uno. ¡En el estamos completos! Esta es la tierra prometida.

Escríbeme si estas recibiendo bendición.

Bendiciones.

Abdiel Salas

abdielsalas@live.com

Su amor es suficiente

septiembre 2, 2012

 

Que quiere decir Dios cuando dice:

 

“Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo”. 2 Corintios 12:9 RVA60

 

Otra versión dice:

 

“Pero el Señor me ha dicho: «Mi amor es todo lo que necesitas; pues mi poder se muestra plenamente en la debilidad.» Así que prefiero gloriarme de ser débil, para que repose sobre mí el poder de Cristo”. 2 Corintios 12:9 DHH

 

El vacio en todos nosotros:

 

Todos tenemos un vacio que necesitamos llenar, es decir para sentirnos completos necesitamos complementarlo con algo más en nuestra vida. Ese vacío se presenta de muchas maneras, mayormente por las cosas que traen una satisfacción aunque sea temporal. Esa satisfacción muchas veces es demasiado temporal y pasajera aunque dure varios años no nos satisface del todo. Aun la palabra misma, el conocimiento, las riquezas, las posesiones, las amistades, una persona, un sueño, la religión, etc. Dios en su diseño nos hizo con esa falta, con esa necesidad que debemos  satisfacer. Pareciera que Dios nos dejara probar tantas cosas en la vida para demostrarnos que es realmente a él a quien andamos buscando.

 

“Cuídate de no olvidarte de Jehová tu Dios, para cumplir sus mandamientos (dirección), sus decretos y sus estatutos que yo te ordeno hoy; no suceda que comas y te sacies, y edifiques buenas casas en que habites, y tus vacas y tus ovejas se aumenten, y la plata y el oro se te multipliquen, y todo lo que tuvieres se aumente; y se enorgullezca tu corazón, y te olvides de Jehová tu Dios, que te sacó de tierra de Egipto, de casa de servidumbre; que te hizo caminar por un desierto grande y espantoso, lleno de serpientes ardientes, y de escorpiones, y de sed, donde no había agua, y él te sacó agua de la roca del pedernal; que te sustentó con maná en el desierto, comida que tus padres no habían conocido, afligiéndote y probándote, para a la postre hacerte bien; y digas en tu corazón: Mi poder y la fuerza de mi mano me han traído esta riqueza. Sino acuérdate de Jehová tu Dios, porque él te da el poder para hacer las riquezas, a fin de confirmar su pacto que juró a tus padres, como en este día”. Deuteronomio 8:11-18

 

Dios sabe que en el corazón del hombre hay una tendencia a separarnos de él, a remplazarlo con algo que no es él. Ya sea con conocimiento, sea placer, sea posesiones, sea dinero, sean religiones, sean creencias. Dios sin embargo el quiere ocupar ese vacío de nuestro corazón.  Dios en su misericordia y amor le dio a la gente de Israel en el desierto una ley que cumplir, mas sin embargo el orgullo puede cambiar el sentido de las cosas. La ley o instrucción estaba destinada a que el hombre reflexionara sobre su condición delante de Dios, pero más que una ley era un conjunto de instrucciones para que le fuera bien al pueblo. Dios a través de esta ley nos dio parámetros para llegar a él, es decir el destino que llevaba la ley era encontrarlo él. Esta ley sin embargo no era perfecta para no depende de ella sino de Dios el dador de la ley (instrucción). Aunque la ley es santa, no reemplaza a Dios mismo. Estos parámetros o mandamientos por provenir de parte de Dios son santos y son especiales, nos acercan a Dios. Moisés solo llegó a los límites de tierra prometida con la ley (instrucción) como queriendo decir que estaba incompleta porque faltaba Cristo. Pero aun así todas las cosas que hagamos no son suficientes para llenar ese vacío del corazón del hombre. Esta porción de Deuteronomio dice que Dios trajo al hombre por el desierto para humillarlos, para probar que había en el corazón. (Esta verdad se cumple en nuestras vidas). Humillar quiere decir reconocer y en ningún momento es despreciar al hombre sino que reconozca quien es Dios.

 

El vacio es el desierto en el corazón:

 

El desierto significa el caminar en Dios para llenar una necesidad, esa búsqueda nos lleva a probar muchas cosas. En el desierto la gente se hizo de Dioses y se fabricó objetos de adoración (el hombre queriendo llenar ese vacío). En el desierto Dios te quiere enseñar que nada de lo que hagas podrá darte lo que Dios te puede dar. Dios le dio la ley a su pueblo mas sin embargo la ley no los metió a la tierra prometida. La ley fue dada inmediatamente después de salir de Egipto. Así que la ley los acompañó por sus cuarenta años en el desierto pero la ley no los metió a la tierra prometida. Sin embargo, Dios determinó el tiempo y la razón para entrar a la tierra prometida. Fue Dios y fue cuando él decidió esta es otra lección de vida.

 

Las pruebas del desierto nos hacen reconocer que no depende de nosotros y por más que intentemos de poner nuestra vida en nuestras propias manos nunca alcanzaremos a merecer la salvación o las bendiciones de Dios. Las pruebas del desierto son para evitar que podamos poseer la verdad de Dios con orgullo. El desierto es la preparación de Dios en tu vida para prepárate para poseer la tierra. Dios quiere evitar que creas que tu esfuerzo lo logro. Siempre habrá una debilidad que te lo recuerde que sin Dios no eres nadie. ¿Estas listo para recibir mas bendición?  Gózate porque después del desierto hay una bendición grande de parte de Dios una vez que dejas que tu orgullo muera.

 

“En el desierto la gente disfruto del maná, pero en el nuevo testamento Jesus enseñó con verdadero pan.”

 

Todas las ilustraciones de Jesús fueron con verdadero pan. Y ya para cumplir su propósito en la cruz, dijo yo soy el verdadero pan que descendió del cielo. Ese maná del desierto anunciaba el verdadero pan. Tomad comed este es mi cuerpo, soy yo el que cada mañana Dios declaraba en el desierto desde los cielos que iba a descender.

 

¡Cada mañana Dios mostró su misericordia anunciando el verdadero pan!.

 

En el desierto Dios te habla sin que le entiendas porque tu corazón esta endurecido todavía. Tú puedes ver el maná pero no alcanzas a entender la gran misericordia de Dios, el verdadero pan del cielo Jesucristo. Tú has decidido seguir tu camino pero él no te ha abandonado. En el desierto el provee del agua de la roca. Ese manantial que temporalmente quita la sed y Dios no te abandona para no desahuciarte. Jesus es la verdadera agua recuerdas lo que él dijo: “él tenga sed que venga a mí y beba”. “Yo le daré del agua de vida”.

 

 

 

Nada podrá saciar tu ser solo Jesús:

 

Nada podrá saciar tu ser, Dios en su infinito amor y misericordia permitirá que pruebes todo hasta darte cuenta que mas que necesitar una religión, riquezas, posesiones, placeres, conocimiento… más que todo eso, lo necesitas a él. ¡Su amor es suficiente!. Su amor es lo único que puede satisfacer tu corazón.

 

Entraras a la tierra prometida cuando te des cuenta que no hay nada que tengas para gloriarte, no hay nada que poseas para llevarte a la bendición. Es él, él es la bendición, a pesar de tu vacio y tu necesidad, él es el único que llenará ese vacío constante, se llama Jesucristo.

 

Moisés representa más que un personaje en la biblia es una etapa de tu vida y de la mía. Es la etapa que todos debemos cruzar, esa etapa representa lo que yo nunca lograre por mis esfuerzos. La ley no se dio dentro de la tierra prometida, se dio afuera de la tierra prometida. Dios nunca dijo la ley te meterá dentro de la tierra prometida, pero sí dijo: ‘’yo te meteré dentro de la tierra”.

 

Hay áreas de tu vida deben ser conquistadas, son áreas que no han sido doblegadas a Dios, tal vez hay cosas que han querido reemplazar a Dios. Tú lo sabes, nadie más lo sabe. ¿Entras a la tierra por la promesa o por cumplir los mandamientos?. Dios determinó un tiempo para meter a su pueblo a la tierra prometida (40 años), pero no fue el cumplimiento de la ley, en todo caso entró el que quiso entrar. Los que no quisieron se quedaron afuera porque les pareció mejor (Dos tribus y media). Es decir continuaron con su soberbia. Imagínate cuarenta años esperando conquistar la tierra prometida y algunos prefirieron quedarse afuera.

 

Dios nos lleva a los límites y nos muestra la tierra prometida, pero el Moisés que llevamos dentro no nos dejará entrar. ¡Ese Moisés debe morir!. Moisés si cumplió con la ley ¿Pero porque Dios no permitió que Moisés entrará a poseer la tierra?. Porque Dios nos estaba dando una lección de vida. Recuerda Moisés representa una etapa de tu vida y la mía.

 

Moisés a pesar de ser espiritual y seguir a Dios con humildad y mansedumbre ma que nadie en la tierra, Moisés representaba todo aquello que nos lleva a depender de nosotros mismos, esa característica siempre acompañó a Moisés. Ni su humildad y mansedumbre lo metieron a la tierra prometida porque en la tierra prometida no puede entrar el orgullo. Por eso Moisés se fatigó, por eso padeció, por eso regresó al desierto después de cuarenta años. Moisés vivió en total ochenta años de su vida en el desierto. Moisés es la figura que Dios uso para darnos esta lección de vida. Después también Dios escogió a todo un pueblo para enseñarnos estos principios.

 

Josué fue una persona que se distinguió por creerle a Dios. Todos conocemos su atrevimiento, estuvo a punto de ser apedreado por creerle a Dios. Aguantó cuarenta años sabiendo lo que Dios era capaz de hacer por obedecerle. Si bien Moisés es un gran ejemplo para nuestra vida para bien, Josué lo fue para enseñarnos a depender de las fuerzas de Dios desde un inicio. Josué entró a conquistar la tierra prometida, las primeras murallas que debieron caer cayeron por el poder de Dios y no la sabiduría de Josué. No cayeron por cumplir la ley, cayeron por obedecer a Dios. Cayeron por depender de Dios completamente.

 

Pasaron cuarenta años para que la gente de Israel se diera cuenta que solo con rodear las murallas durante siete días y al séptimo día siete veces, y al gritar fuerte las murallas caerían. ¡Las murallas de su mente y de su corazón también cayeron ese día!.

 

Bástate mi gracia…

 

Bástate mi gracia significa que su amor es suficiente, su gracia es suficiente, su misericordia es suficiente, su perdón, el es suficiente para mí y para cada uno. ¡En el estamos completos! Esta es la tierra prometida.

 

Escríbeme si estas recibiendo bendición.

Bendiciones.

 

Abdiel Salas

abdielsalas@live.com

 

septiembre 2, 2012

Abdiel Salas Blog

 

Que quiere decir Dios cuando dice:

 

“Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo”. 2 Corintios 12:9 RVA60

 

Otra versión dice:

 

“Pero el Señor me ha dicho: «Mi amor es todo lo que necesitas; pues mi poder se muestra plenamente en la debilidad.» Así que prefiero gloriarme de ser débil, para que repose sobre mí el poder de Cristo”. 2 Corintios 12:9 DHH

 

El vacio en todos nosotros:

 

Todos tenemos un vacio que necesitamos llenar, es decir para sentirnos completos necesitamos complementarlo con algo más en nuestra vida. Ese vacío se presenta de muchas maneras, mayormente por las cosas que traen una satisfacción aunque sea temporal. Esa satisfacción muchas veces es demasiado temporal y pasajera aunque…

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Su amor es suficiente

septiembre 2, 2012

 

Que quiere decir Dios cuando dice:

 

“Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo”. 2 Corintios 12:9 RVA60

 

Otra versión dice:

 

“Pero el Señor me ha dicho: «Mi amor es todo lo que necesitas; pues mi poder se muestra plenamente en la debilidad.» Así que prefiero gloriarme de ser débil, para que repose sobre mí el poder de Cristo”. 2 Corintios 12:9 DHH

 

El vacio en todos nosotros:

 

Todos tenemos un vacio que necesitamos llenar, es decir para sentirnos completos necesitamos complementarlo con algo más en nuestra vida. Ese vacío se presenta de muchas maneras, mayormente por las cosas que traen una satisfacción aunque sea temporal. Esa satisfacción muchas veces es demasiado temporal y pasajera aunque dure varios años no nos satisface del todo. Aun la palabra misma, el conocimiento, las riquezas, las posesiones, las amistades, una persona, un sueño, la religión, etc. Dios en su diseño nos hizo con esa falta, con esa necesidad que debemos  satisfacer. Pareciera que Dios nos dejara probar tantas cosas en la vida para demostrarnos que es realmente a él a quien andamos buscando.

 

“Cuídate de no olvidarte de Jehová tu Dios, para cumplir sus mandamientos (dirección), sus decretos y sus estatutos que yo te ordeno hoy; no suceda que comas y te sacies, y edifiques buenas casas en que habites, y tus vacas y tus ovejas se aumenten, y la plata y el oro se te multipliquen, y todo lo que tuvieres se aumente; y se enorgullezca tu corazón, y te olvides de Jehová tu Dios, que te sacó de tierra de Egipto, de casa de servidumbre; que te hizo caminar por un desierto grande y espantoso, lleno de serpientes ardientes, y de escorpiones, y de sed, donde no había agua, y él te sacó agua de la roca del pedernal; que te sustentó con maná en el desierto, comida que tus padres no habían conocido, afligiéndote y probándote, para a la postre hacerte bien; y digas en tu corazón: Mi poder y la fuerza de mi mano me han traído esta riqueza. Sino acuérdate de Jehová tu Dios, porque él te da el poder para hacer las riquezas, a fin de confirmar su pacto que juró a tus padres, como en este día”. Deuteronomio 8:11-18

 

Dios sabe que en el corazón del hombre hay una tendencia a separarnos de él, a remplazarlo con algo que no es él. Ya sea con conocimiento, sea placer, sea posesiones, sea dinero, sean religiones, sean creencias. Dios sin embargo el quiere ocupar ese vacío de nuestro corazón.  Dios en su misericordia y amor le dio a la gente de Israel en el desierto una ley que cumplir, mas sin embargo el orgullo puede cambiar el sentido de las cosas. La ley o instrucción estaba destinada a que el hombre reflexionara sobre su condición delante de Dios, pero más que una ley era un conjunto de instrucciones para que le fuera bien al pueblo. Dios a través de esta ley nos dio parámetros para llegar a él, es decir el destino que llevaba la ley era encontrarlo él. Esta ley sin embargo no era perfecta para no depende de ella sino de Dios el dador de la ley (instrucción). Aunque la ley es santa, no reemplaza a Dios mismo. Estos parámetros o mandamientos por provenir de parte de Dios son santos y son especiales, nos acercan a Dios. Moisés solo llegó a los límites de tierra prometida con la ley (instrucción) como queriendo decir que estaba incompleta porque faltaba Cristo. Pero aun así todas las cosas que hagamos no son suficientes para llenar ese vacío del corazón del hombre. Esta porción de Deuteronomio dice que Dios trajo al hombre por el desierto para humillarlos, para probar que había en el corazón. (Esta verdad se cumple en nuestras vidas). Humillar quiere decir reconocer y en ningún momento es despreciar al hombre sino que reconozca quien es Dios.

 

El vacio es el desierto en el corazón:

 

El desierto significa el caminar en Dios para llenar una necesidad, esa búsqueda nos lleva a probar muchas cosas. En el desierto la gente se hizo de Dioses y se fabricó objetos de adoración (el hombre queriendo llenar ese vacío). En el desierto Dios te quiere enseñar que nada de lo que hagas podrá darte lo que Dios te puede dar. Dios le dio la ley a su pueblo mas sin embargo la ley no los metió a la tierra prometida. La ley fue dada inmediatamente después de salir de Egipto. Así que la ley los acompañó por sus cuarenta años en el desierto pero la ley no los metió a la tierra prometida. Sin embargo, Dios determinó el tiempo y la razón para entrar a la tierra prometida. Fue Dios y fue cuando él decidió esta es otra lección de vida.

 

Las pruebas del desierto nos hacen reconocer que no depende de nosotros y por más que intentemos de poner nuestra vida en nuestras propias manos nunca alcanzaremos a merecer la salvación o las bendiciones de Dios. Las pruebas del desierto son para evitar que podamos poseer la verdad de Dios con orgullo. El desierto es la preparación de Dios en tu vida para prepárate para poseer la tierra. Dios quiere evitar que creas que tu esfuerzo lo logro. Siempre habrá una debilidad que te lo recuerde que sin Dios no eres nadie. ¿Estas listo para recibir mas bendición?  Gózate porque después del desierto hay una bendición grande de parte de Dios una vez que dejas que tu orgullo muera.

 

“En el desierto la gente disfruto del maná, pero en el nuevo testamento Jesus enseñó con verdadero pan.”

 

Todas las ilustraciones de Jesús fueron con verdadero pan. Y ya para cumplir su propósito en la cruz, dijo yo soy el verdadero pan que descendió del cielo. Ese maná del desierto anunciaba el verdadero pan. Tomad comed este es mi cuerpo, soy yo el que cada mañana Dios declaraba en el desierto desde los cielos que iba a descender.

 

¡Cada mañana Dios mostró su misericordia anunciando el verdadero pan!.

 

En el desierto Dios te habla sin que le entiendas porque tu corazón esta endurecido todavía. Tú puedes ver el maná pero no alcanzas a entender la gran misericordia de Dios, el verdadero pan del cielo Jesucristo. Tú has decidido seguir tu camino pero él no te ha abandonado. En el desierto el provee del agua de la roca. Ese manantial que temporalmente quita la sed y Dios no te abandona para no desahuciarte. Jesus es la verdadera agua recuerdas lo que él dijo: “él tenga sed que venga a mí y beba”. “Yo le daré del agua de vida”.

 

 

 

Nada podrá saciar tu ser solo Jesús:

 

Nada podrá saciar tu ser, Dios en su infinito amor y misericordia permitirá que pruebes todo hasta darte cuenta que mas que necesitar una religión, riquezas, posesiones, placeres, conocimiento… más que todo eso, lo necesitas a él. ¡Su amor es suficiente!. Su amor es lo único que puede satisfacer tu corazón.

 

Entraras a la tierra prometida cuando te des cuenta que no hay nada que tengas para gloriarte, no hay nada que poseas para llevarte a la bendición. Es él, él es la bendición, a pesar de tu vacio y tu necesidad, él es el único que llenará ese vacío constante, se llama Jesucristo.

 

Moisés representa más que un personaje en la biblia es una etapa de tu vida y de la mía. Es la etapa que todos debemos cruzar, esa etapa representa lo que yo nunca lograre por mis esfuerzos. La ley no se dio dentro de la tierra prometida, se dio afuera de la tierra prometida. Dios nunca dijo la ley te meterá dentro de la tierra prometida, pero sí dijo: ‘’yo te meteré dentro de la tierra”.

 

Hay áreas de tu vida deben ser conquistadas, son áreas que no han sido doblegadas a Dios, tal vez hay cosas que han querido reemplazar a Dios. Tú lo sabes, nadie más lo sabe. ¿Entras a la tierra por la promesa o por cumplir los mandamientos?. Dios determinó un tiempo para meter a su pueblo a la tierra prometida (40 años), pero no fue el cumplimiento de la ley, en todo caso entró el que quiso entrar. Los que no quisieron se quedaron afuera porque les pareció mejor (Dos tribus y media). Es decir continuaron con su soberbia. Imagínate cuarenta años esperando conquistar la tierra prometida y algunos prefirieron quedarse afuera.

 

Dios nos lleva a los límites y nos muestra la tierra prometida, pero el Moisés que llevamos dentro no nos dejará entrar. ¡Ese Moisés debe morir!. Moisés si cumplió con la ley ¿Pero porque Dios no permitió que Moisés entrará a poseer la tierra?. Porque Dios nos estaba dando una lección de vida. Recuerda Moisés representa una etapa de tu vida y la mía.

 

Moisés a pesar de ser espiritual y seguir a Dios con humildad y mansedumbre ma que nadie en la tierra, Moisés representaba todo aquello que nos lleva a depender de nosotros mismos, esa característica siempre acompañó a Moisés. Ni su humildad y mansedumbre lo metieron a la tierra prometida porque en la tierra prometida no puede entrar el orgullo. Por eso Moisés se fatigó, por eso padeció, por eso regresó al desierto después de cuarenta años. Moisés vivió en total ochenta años de su vida en el desierto. Moisés es la figura que Dios uso para darnos esta lección de vida. Después también Dios escogió a todo un pueblo para enseñarnos estos principios.

 

Josué fue una persona que se distinguió por creerle a Dios. Todos conocemos su atrevimiento, estuvo a punto de ser apedreado por creerle a Dios. Aguantó cuarenta años sabiendo lo que Dios era capaz de hacer por obedecerle. Si bien Moisés es un gran ejemplo para nuestra vida para bien, Josué lo fue para enseñarnos a depender de las fuerzas de Dios desde un inicio. Josué entró a conquistar la tierra prometida, las primeras murallas que debieron caer cayeron por el poder de Dios y no la sabiduría de Josué. No cayeron por cumplir la ley, cayeron por obedecer a Dios. Cayeron por depender de Dios completamente.

 

Pasaron cuarenta años para que la gente de Israel se diera cuenta que solo con rodear las murallas durante siete días y al séptimo día siete veces, y al gritar fuerte las murallas caerían. ¡Las murallas de su mente y de su corazón también cayeron ese día!.

 

Bástate mi gracia…

 

Bástate mi gracia significa que su amor es suficiente, su gracia es suficiente, su misericordia es suficiente, su perdón, el es suficiente para mí y para cada uno. ¡En el estamos completos! Esta es la tierra prometida.

 

Escríbeme si estas recibiendo bendición.

Bendiciones.

 

Abdiel Salas

abdielsalas@live.com